23·09·2020
La Posidonia, el tesoro natural submarino del Mediterráneo

Cualquiera que conozca las playas y las costas de las Islas Baleares y que haya visitado otros destinos de vacaciones sabe de sobra que en ningún otro lugar del Mediterráneo va a poder disfrutar de unas aguas claras y cristalinas como las que se encuentran aquí.

 

Puede que influyan aspectos como la preservación y el cuidado del litoral, la contaminación o la masificación de ciertos destinos turísticos. Sin embargo, el factor fundamental que explica esta pureza y claridad es la presencia de las praderas de Posidonia en el lecho marino.

 

¿Qué es la Posidonia?

 

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La Posidonia Oceanica es una planta marina endémica del Mediterráneo de gran importancia ecológica. En otros tiempos hubo grandes praderas de estas algas cubriendo enormes extensiones a lo largo de las costas continentales.

 

Hoy, son pocos los pequeños reductos de posidonia que sobreviven en regiones muy localizadas (la Costa Azul francesa y el norte de Córcega, la costa de Liguria en Italia, en el estrecho de Messina entre Sicilia y Calabria, el Golfo de Sirte en Túnez y algunos puntos de la Costa Dálmata), pero la concentración más alta de praderas de Posidonia se halla en el archipiélago balear.

 

La cualidad principal de la Posidonia es su función de liberar grandes cantidades de oxígeno al agua, además de servir de cobijo y hábitat a numerosas especies de peces. Pero no sólo eso: también actúa como barrera natural ante la erosión de la costa y actúa como “filtro” que retiene la suciedad e impurezas del agua.

 

En definitiva, gracias a la Posidonia que podemos disfrutar de las aguas más limpias del Mediterráneo en un día de playao en un evento de lujo en el mar.

 

Un tesoro amenazado

 

Pero este tesoro natural de valor incalculable se halla en peligro. Hace décadas que las praderas de Posidonia se hallan en regresión debido a la contaminación del agua, la práctica de deportes náuticos sin control y a la pesca de arrastre.

 

Por si esto fuera poco, la Posidonia también debe enfrentarse a los perjuicios causados por ciertas especies invasoras, en concreto ciertas algas tropicales que a causa del calentamiento global y aumento de la temperatura del mar han proliferado en el Mediterráneo sin ningún control.

 

Por suerte las autoridades trabajan desde hace algunos años en estrategias para preservar las praderas de Posidonia, la cual nos permite disfrutar de las aguas transparentes de las playas y calas de Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera.

 

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